domingo, 23 de mayo de 2021

EL BORBON QUE MATO A SU MUJER



José María de Borbón y De la Torre nació en Madrid en 1883. Duque de Sevilla, era un reputado coronel infantería con  un futuro muy prometedor que se labró en las campañas de Marruecos. Era tío abuelo del actual duque de Sevilla, Francisco de Paula de Borbón. Pero el parentesco más importante  era el de primo del rey Alfonso XIII. Algo que le serviría de mucha ayuda en febrero de 1926. Algunos años antes, en 1909, María Luisa Rich y Carbajo se casó con José María de Borbón y De La Torre sin saber que aquel matrimonio era su sentencia de muerte.


El 5 de febrero de 1926, José María de Borbón y De La Torre, asesinó a María Luisa de Rich en su domicilio de la calle Andrés Mellado de Madrid de tres disparos por la espalda, por una discusión sobre una quemadura que sufrió uno de sus hijos en un pie, según declaraciones posteriores de una criada en las vistas judiciales ante el juez Ruidabert.

El suceso fue relatado así por el diario La Libertad en 1926:

“Ayer por la tarde, minutos después de las tres, en el piso segundo izquierda de la casa número 4 de la calle Andrés de Mellado, se desarrolló un drama sangriento, que motivó la muerte de doña María Luisa Ricci Carbajo, de treinta y cinco años de edad, esposa del teniente coronel de aviación d. José María de Borbón y La Torre.

Según la referencia que del suceso nos han hecho, desde hace mucho tiempo entre los esposos existían frecuentes disgustos.


Ayer, después de haber pasado la mañana en Cuatro Vientos, como era su costumbre, el señor Borbón fue a su domicilio muy cerca de las tres y media de la tarde, encontrándose sorprendido al ver que su esposa y sus hijos estaban sentados a la mesa; pero que ya habían terminado de comer.

Se asegura que el sr. Borbón dispuso que tanto sus hijos como las dos criadas abandonasen la habitación encerrándose después de conseguido esto con doña María Luisa en el cuarto de baño.

Nadie sabe ciertamente lo que entre ellos pasó: solo sí que discutieron y que doña María Luisa salió al pasillo con el propósito de ganar la puerta que comunica con la escalera. En ese instante fue alcanzada por el proyectil salido de una pistola que el sr. Borbón empuñaba.

La detonación atrajo la atención de los vecinos y transeúntes, que pronto averiguaron lo sucedido, haciendo diversos comentarios.

Doña María Luisa falleció a los pocos minutos de lo ocurrido el hecho haciendo innecesaria la atención facultativa… poco después de ocurrido el crimen, acudió al lugar del suceso el juez militar de guardia, quien ordenó que el agresor pasase a Prisiones Militares, cosa que realizó acto seguido un automóvil, acompañado por un guardia de seguridad.

D. José María se despidió ayer por la mañana de sus amigos y compañeros de Cuatro Vientos diciéndoles que partía hoy para Cuba. Sobre las dos de la tarde se presentó en la fotografía de nuestro compañero Alfonso, haciendo el encargo de unas fotografías llamadas ‘carnets’ y que se utilizan para los pasaportes mostrando interés en el que el encargo estuviera cumplimentado a las cinco de la tarde. Desde la fotografía, el sr Borbón se dirigió a su domicilio dando lugar al drama que a grandes rasgos hemos relatado”.

El teniente coronel de infantería José María de Borbón y De La Torre jamás cumplió condena por el terrible asesinato. Su parentesco con Alfonso XIII ayudó a que su causa fuera sobreseída por enajenación emocional. Según cuenta José María Zavala en su libro La maldición de los Borbones, Alfonso XIII hizo lo posible para que el caso fuera silenciado y juzgado sin pena alguna gracias a la fuerte amistad que unía al rey con el padre del criminal. El caso desapareció de la prensa de la época en la semana posterior al crimen. José María De Borbón, tres años después del crimen, causó baja indefinida en Marruecos por “incapacidad total”, allí se refugió para huir del terrible asesinato de su mujer.

Al contrario de lo que pudiera parecer no era habitual que estos crímenes quedaran impunes, como demuestra que el mismo día del crimen la prensa de entonces publicara la petición de pena de muerte para otro asesino.







viernes, 14 de mayo de 2021

CALLE DE LAS VENERAS



Esta calle va desde las calle de los Trijillos a la de Preciados.

Aquí estaban las casas de don Antonio Muriel y Valdivieso y de su mujer, doña Catalina de Medina, las cuales se veían adornadas con escudillosde piedra, por lo que las llamaban de las veneras, nobre que luego quedó a la calle, que por cierto también llamada del Embajador de Francia.
Esquina a la calle de Preciados, estaba la casa llamada de las Parrillas, pr tenerlas rn sus escudos. Esta fue la finca que la reina Amalia, tercera esposa de Fernando VII, dejó al Monasterio de El Escorial para que a su venta la dijeran varias misas cada año. 

En el entresuelo del número 4 vivió mucho tiempo. durante sus primeras estancias en Madrid, el gran poeta Rubén Dario.

Fuente : Las calles de Madrid de Pedro de Rŕpide

miércoles, 12 de mayo de 2021

MONUMENTO A DAOIZ Y VELARDE

La iniciativa de levantar un homenaje a los héroes partió del propio rey Fernando VII y fue sufragado por el Cuerpo de Artillería. Fue encomendado al escultor Antonio Solá, quién lo realizó en 1822, durante su estancia en Roma, tras presentar un presupuesto que ascendía a 3.000 duros para realizarlo en mármol de Carrara. Fue traído a Madrid en 1831 y se expuso en el Museo del Prado, para instalarse quince años después en el Parterre del Retiro. Posteriormente fueron trasladados de nuevo al Museo del Prado, de donde salieron en 1869 para ser colocados en la confluencia de las calles Carranza y Ruiz y mantenidos hasta 1879. Nuevamente fue conducido a otra ubicación, esta vez a la plaza de la Moncloa, donde estuvo hasta el año 1932, que fue instalado definitivamente en la plaza del Dos de Mayo, junto al Arco de Monteleón.
 Fotografía J. Laurent, siglo XIX Archivo Ruiz Vernacci F.P.H.