Esta calle está solamente formada por la escalinata de bajada a esta calle, y era paso para la casa del marqués de Tolosa, por donde empezó uno de los grandes incendios la Plaza Mayor, a las 11 de la noche del 16 de agosto de 1790.
Es un paraje de los más típicos de Madrid, antiguamente elegido en el invierno especialmente por gente del hampa como cobijo y dormitorio. A su entrada existía una taberna famosa y muy antigua, la del Pulpitillo, por la forma que presenta un trozo de verja que hay a su entrada. Ya en 1774 se hacía mención de ella por la licencia que la sala de alcaldes de Casa y Corte expidió en esa fecha a Maria Montalvo para que pudiese en el puesto de la mesilla de la Escalerilla de Piedra vinos generosos de dentro y fuera del reino, por medida y por botella.
Fuente: Las calles de Madrid, de Pedro de Répide
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